La brisa
seca
Se deshoja
En este
invierno.
Por
ese verano
Que
dejó.
Ese
hombre, Brisa,
Te dedicó
tiempo,
Palabras
Y corazón
Ingenio
de algún demonio
Que por
ahí vio.
Él,
seco ahora
Por la
maldición del hombre:
El ego
y el amor
Queda.
Queda
brisa seca
Que olvida
a medias
Y me
dice las palabras
Pocas
De una
alma
En pena
Que juega
En el
desierto.
Desierto
seco
Como
la Brisa
Que nos
acompaña
Cuando
Nos creíamos
solos
Solos
y secos
Y sin
sabor.
Porque
nadie
nos
pone a prueba
para
ver si el amor
existe
o si
podemos jugarla
a
que lo somos.
Aunque
lloremos
Secas
lágrimas
Como
esta Brisa
En este
invierno
En el
desierto
En lo
desierto
De nuestras
almas
Que también
Penan
Ante
Lo
Que
Es
Cierto.